Trabajamos para que las puertas del deporte se abran a toda la sociedad, para que siempre que haya un escalón se coloque una rampa, para que los vestuarios, accesos a piscinas, gimnasios, etc. estén adaptados a toda la sociedad.

Trabajamos para eliminar las barreras en la atención a la diversidad. Queremos que la atención que reciba cualquier persona sea integral y universal. Trabajamos formando y empoderando a las personas que trabajan en la atención directa, para hacer que la experiencia deportiva sea, desde el principio, gratificante para todas y todos los usuarios de las instalaciones.

Trabajamos para acabar con la falta de materiales didácticos sobre discapacidad y deporte. Creemos en la importancia de empoderar a los formadores, para que puedan hacer accesible el deporte a todas las personas.

Trabajamos para eliminar uno de los grandes retos que nos encontramos entre las personas que quieren hacer deporte: la falta de ayudas técnicas en los centros deportivos y en los centros escolares. Algunas de estas barreras son la falta de ascensores, andadores, sillas especiales, material adecuado, vestuarios adaptados y con asistencia.

Los colectivos con problemas de movilidad, hiperestimulación, necesidades sensoriales y cognitivas diferentes carecen de espacios ad hoc para desarrollar el deporte. Por ejemplo, las personas con TEA (autismo) o trastorno de conducta, requieren de espacios tranquilos, sin demasiados estímulos (ruidos, luces, etc.). A día de hoy, en Gipuzkoa, no existen lugares o salas específicas para atender y hacer accesible el deporte de las personas más dependientes con discapacidad severa.

La sobreprotección es, muchas veces, una de las barreras más comunes para que alguien con discapacidad haga deporte. Trabajamos para generar confianza en las familias, para que los miedos desaparezcan.

Nos esforzamos para conseguir que la señalética de los espacios y los materiales didácticos, sean accesibles y cuenten con pictogramas, recursos de lectura fácil, braille, lengua de signos, etc.

Normalmente el coste de la actividad es mayor debido a las necesidades de apoyo. Trabajamos para que el precio no sea una barrera para hacer deporte para aquellos que tienen discapacidad.

Todavía, en muchos municipios, seguimos encontrándonos con un modelo de transporte que no siempre es accesible para toda la sociedad. Trabajamos para revertir esta situación.

Trabajamos para facilitar el apoyo comunitario en los diferentes municipios, fomentando las redes de colaboración entre clubes deportivos, asociaciones, entidades municipales, etc.